Con destacados invitados, Faro UDD organizó el seminario “El rol de la Ciencia en la Democracia: desafíos para el Chile actual”, en el que participaron Diana Aurenque, investigadora del Centro de Estudios de Éticas Aplicadas de la Universidad de Chile; Juan Larraín, director del Instituto de Éticas Aplicadas de la UC; y Carlos Rodríguez-Sickert, director del Centro de Investigación en Complejidad Social de la UDD. Por una hora, los académicos reflexionaron sobre este tópico dirigidos por Lucas Miranda, profesor investigador de Faro UDD.
El encuentro abordó las tensiones que enfrenta la ciencia en las democracias actuales. Se reconoció el hecho de que la ciencia es una actividad humana y social cargada de valores, por lo cual mantiene un vínculo activo e importante con la política. Asimismo, se reflexionó acerca del rol de los académicos y científicos a la hora de enfrentar los estudios y conocimientos en la arena política.
El primero en comentar fue Carlos Rodríguez-Sickert quien expuso sobre los riesgos y oportunidades de la ciencia, ejemplificando con el caso de la energía nuclear y la tensión entre las ciencias duras y las humanidades. Reflexionó acerca de los problemas que representa la imposición de estándares éticos a la investigación científica que impidan investigar ciertos tópicos.
Juan Larraín, por su parte, planteó la necesidad de reflexionar sobre la confianza en la ciencia, considerando que se trata de una actividad humana y social sometida a críticas y riesgos. Subrayó la importancia de la diversidad de comunidades científicas y de los procesos de revisión por pares y replicabilidad como elementos que fortalecen la certeza científica. Además, recalcó el daño que ha hecho para la democracia los estudios falsos o las opiniones de personas que no son expertos en la materia. Una conclusión que emerjo de la conservación es que un desafío importante es la manera que la ciencia comunica el riesgo y la incertidumbre de sus resultados a la ciudadanía sin quedar expuesta por ello a los ataques del negacionismo científico.
Por último, Diana Aurenque abordó las tensiones entre la dimensión descriptiva y normativa de la ciencia, advirtiendo sobre los riesgos de esperar de ella orientaciones éticas o morales. Señaló que la misión de la ciencia es investigativa y que corresponde a la filosofía reflexionar sobre sus límites. Asimismo, destacó los desafíos que enfrentan los científicos en un escenario marcado por la posverdad y la sobreexposición emocional en el debate público.