Revitalizando el capital humano: Robert Shimer de la Universidad de Chicago expone en seminario de Faro UDD

Con la presencia del académico de la Universidad de Chicago, Robert Shimer,d el director ejecutivo de Faro UDD, Ernesto Silva, del fundador y académico de Facultad de Economía y Negocios UDD, Cristián Larroulet; y la académica de la misma institución Vesna Mandakovic, se realizó un nuevo encuentro del ciclo Revitalicemos las Instituciones, en esta ocasión enfocado en “Revitalizando el capital humano”.

El encuentro comenzó con la exposición de Robert Shimer, director del programa Economía para Todos de la Universidad de Chicago, quien repasó los orígenes de esta iniciativa. «E4E partió con la idea de que si las personas tomaran solo un curso, si tuvieran apenas nueve semanas de economía, ¿cuáles serían las ideas más importantes que podrían aprender durante esas nueve semanas? Pensamos que muchas veces los cursos introductorios de economía se convierten en clases de matemática aplicada, donde ciertamente se enseñan ideas económicas importantes, pero los estudiantes se quedan con cómo desplazar curvas o cómo hacer ciertos cálculos, y no adquieren una comprensión profunda de cómo funciona el sistema económico y cuál es el papel de los mercados y de los gobiernos en la economía. Así que tratamos de crear un curso que abordara esas preguntas y que les enseñara a nuestros estudiantes a cómo pensar, en vez de decirles qué pensar. Queremos que usen el razonamiento económico para pensar críticamente sobre el mundo que los rodea y para ayudarles a tomar mejores decisiones en su vida y a entender mejor su entorno», señaló.

¿Qué hacer con la IA en la educación superior?

Otro de los temas centrales del encuentro fue el impacto de la inteligencia artificial (IA) en la educación superior. Se reconoció que, en una primera etapa, los docentes tienden a verla como una amenaza, del mismo modo que en su momento ocurrió con las calculadoras. Sin embargo, la proyección es que la IA se convierta en una herramienta de aprendizaje y productividad, capaz de ofrecer tutorías personalizadas y acompañar el proceso formativo de los estudiantes.

Los académicos enfatizaron que el desafío será enseñar a usar la IA, no a evitarla. En ese sentido, la tecnología puede potenciar la creatividad, el pensamiento crítico y la capacidad de análisis, siempre que las universidades formen a los alumnos para aprovecharla y no ser reemplazados por ella.

En tanto, el fundador de la Universidad del Desarrollo, Cristián Larroulet, hizo un repaso de la llegada de los profesores de la Universidad de Chicago a Chile y destacó al pionero en el estudio del capital humano, el profesor Theodore Schultz. Además, se refirió al avance de las nuevas tecnologías y a cómo éstas pueden afectar a un mercado pequeño como el chileno y a un país de ingresos medios.

Por su parte, la profesora Vesna Mandakovic se refirió a las demandas actuales del mercado laboral y a cómo las empresas ya están utilizando inteligencia artificial en sus procesos.

En este contexto, se planteó que la respuesta debe ser mantener procesos permanentes de innovación y competencia, evitando que los líderes tecnológicos se conviertan en monopolios estables. La desigualdad fue identificada como un riesgo más real, especialmente si los gobiernos responden con políticas que desincentiven la participación laboral, como ingresos básicos mal diseñados.

Asimismo, frente a los riesgos de las nuevas tecnologías, se subrayó que la concentración de mercado no es necesariamente negativa si surge de innovaciones que mejoran la calidad y reducen los precios. El problema aparece cuando esa concentración se traduce en rentas excesivas y en el bloqueo de nuevas innovaciones, algo que suele ocurrir cuando las empresas logran capturar al Estado y moldear la regulación a su favor.

Flexibilidad laboral

Otro eje de la conversación fue la regulación laboral y la necesidad de promover flexibilidad y movilidad en un entorno de cambio constante. Se advirtió que políticas que encarecen los despidos o frenan la rotación laboral pueden aliviar problemas en el corto plazo, pero limitan la creación de empleo y la reasignación hacia sectores más productivos.

También se abordó el desafío del reentrenamiento de trabajadores. Se señaló que los programas públicos han tenido escasos resultados, mientras que el sector privado y las universidades, a través de la competencia y la innovación en formación, pueden cumplir un papel más efectivo en la actualización de habilidades.

Finalmente, se advirtió que Chile presenta déficits en competencias básicas —como lectura, matemáticas y resolución de problemas— según informes de la OCDE. Estas habilidades son fundamentales para aprovechar la inteligencia artificial y adaptarse al cambio tecnológico. Por ello, el sistema educativo enfrenta el desafío de fortalecer la capacidad de aprendizaje y adaptación, más que enseñar contenidos rígidos.

El encuentro concluyó con preguntas del público sobre la relación entre inversión en capital humano e investigación y desarrollo, destacando modelos como el de Israel, donde la combinación de inversión privada y gasto público en sectores tecnológicos ha impulsado la innovación y la formación de talento.

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